El vocero presidencial, Manuel Adorni, junto al secretario de Justicia, Sebastián Amerio, anunciaron que el Gobierno enviará al Senado los pliegos de 150 candidatos a jueces, fiscales y defensores del pueblo, buscando llenar vacantes que afectan el funcionamiento judicial. Según Amerio, la administración actual heredó una significativa escasez de jueces (30%) y fiscales (50%), situación que comparó con «jugar un partido de fútbol con tres jugadores menos».

La selección de estos candidatos fue realizada por el Consejo de la Magistratura, que evaluó su idoneidad para ocupar dichos cargos. Según fuentes del Gobierno, la administración planea enviar de 20 a 25 pliegos diarios al Senado, con el objetivo de completar el proceso en aproximadamente ocho días hábiles, aunque podrían surgir demoras por temas burocráticos y falta de interlocutores únicos en el Senado.

Para aprobar los nombramientos, se requerirá el acuerdo de dos tercios del Senado, por lo que el Gobierno enfrentará desafíos en las negociaciones, especialmente frente a la propuesta de senadores de condicionar estos nombramientos a la aprobación de candidatos para la Corte Suprema, un acuerdo que el Ejecutivo ha rechazado hasta el momento.